Pregúntanos por despachos individuales.

Hay muchas profesiones en las que un despacho es indispensable para llevar a cabo su desempeño empresarial. No sirve una mesa y un ordenador, por mucho que se pueda llegar a pensar. Para trabajar se necesita un espacio específico, un lugar amplio, con paredes blancas o de color claro para dar sensación de tranquilidad y hacer que sea luminoso.

Montar un despacho por cuenta propia puede salir demasiado caro.

Para tener un despacho se requiere una inversión económica importante. No solo hay que alquilar un local, sino que hay que amueblarlo acorde al desempeño a realizar. Se necesitan muebles como un amplio escritorio, armarios, archivos, estanterías, sillas de confidente por si se reciben visitas, etc.

Todo ello va incrementando los precios y al final sólo para tener un espacio donde poder trabajar cómodamente, se habrá desembolsado una importante cantidad de dinero. Otro problema que puede haber es que el local alquilado no está donde esperamos o donde no nos gustaría, no tiene buenas comunicaciones, etc.

¿Sabías que puedes prescindir de todo esto? Alquilar un despacho es una de las tendencias que cada vez más profesionales están adoptando. Una de las razones es porque no tienen que preocuparse de perder tiempo visitando lugares para alquilar que tengan una buena ubicación, buenas comunicaciones, que estén en una zona de servicios, etc.

De hecho, tampoco se tendrá que llegar a desembolsar dinero comprando uno u otro mueble, contratando un servicio de acceso a Internet, electricidad, agua y todos los servicios básicos que requeriría un despacho.

  • Ahorro económico

  • Facilidad para el Cooworking

  • Ambiente de trabajo.

  • Cruce de clientes

  • Aumenta el rendimiento comercial.

Suena muy bien, pero… ¿cómo es posible? En un centro de negocios, cualquier profesional tendrá a su disposición su propio espacio, no solo para trabajar durante unas horas sino para alquilar el espacio por meses y establecer su despacho donde poder recibir a sus socios, clientes, etc.

No faltará de nada, tanto en lo referente a mobiliario como acceso a Internet, electricidad, agua y todo lo que se pudiera requerir. Además, si fuese necesario se pueden contratar servicios de secretariado y diferentes complementos que harán que el trabajo sea mucho más fácil. Y todo ello por mucho menos de lo que nos pudiéramos imaginar.